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Zaragoza, Aragón, Spain
Sindicalista de UGT Zaragoza entre 1977 a 2006. Periodo en el que fue uno de los refundadores de UGT Zaragoza, Sº de Acción Reivindicativa de UGT Zaragoza, Sº General de UGT en General Motors España, Presidente del Comité de Empresa de GM España, Sº General de UGT Metal Zaragoza, miembro del Comité Confederal de UGT y formó parte del Comité Europeo y Mundial de General Motors .

viernes, 21 de diciembre de 2012

El PSOE en la pendiente


He oído decir en el sector de automoción, que cuando una marca pierde la confianza tarda quince años en recuperarla. En este estado se encuentra hoy el PSOE. No se cree  en su marca como tal ni en sus dirigentes, siendo asombrosa su caída en las encuestas y en los comentarios de la gente. Así pues, hasta el 2026 no le correspondería gobernar. Rubalcaba estaría olvidado. También por desafecto, al Partido Socialista francés le costó ese tiempo (16 años) volver al poder, después de cambiar a varios líderes, lo mismo que a ciencia cierta ocurriría aquí.

Pero si esta va a ser la hoja de ruta. ¿Alguien entiende la batería-calendario de conferencias y actos internos sin trascendencia vital que, se han decidido hasta casi el 2015, como el mejor ataque ante tanta adversidad? Solo se pasa un paño para que dure el mueble, cuando se necesita urgentemente otro resplandeciente y de buena madera, para que recupere el color y la fiabilidad perdida. El partido tiene que trasmitir a la sociedad mensajes firmes y creíbles a mayor ritmo del  habitual, de forma continua, porque solo así podrá acortar los años de fatiga sentenciados. Por tanto, se debería tener como único objetivo orgánico, el bien de la marca y por ende de sus votantes. Cambiando lo que haya que cambiar, en aras de un fin partidista, no personalista, como parece que se impone.

Cada día que pasa me reafirmo en la opinión, de que el 28 Congreso Federal del PSOE (Sevilla 3-5 de febrero de 2012) fue un fracaso para el partido. Lo ganó Alfredo Pérez Rubalcaba por 22 votos más que Carme Chacón, resultando un liderazgo poco ilusionante por la falta de carisma del nuevo Secretario General. Es más un gestor que un líder, como se ha podido comprobar a lo largo de este año. Su segundo e insalvable inconveniente, se da por venir desde la vicepresidencia del gobierno socialista anterior, siendo para muchos simpatizantes, corresponsable de los desengaños y equivocaciones que se generaron. Hoy, el 81% de sus posibles votantes desconfían de Rubalcaba.

Tal vez, el error partía ya de las dos únicas candidaturas en liza. Tanto Alfredo como Carme por haber sido ministra, padecían el síndrome José Luis Rodríguez Zapatero y posiblemente, ninguna de estas dos personas debió optar a la máxima responsabilidad.  Ella, desde el congreso ha estado desaparecida. Él, cada vez con menos empuje, sobrevive a las circunstancias, quien sabe si queriendo llegar a ser presidente del gobierno, para colmar sus deseos; mientras el socialismo se desvanece, desciende por la pendiente.

A los militantes del partido los tranquilizaría mucho, si este compañero renunciara a ser el próximo candidato a las legislativas de 2015, como lo fue en los comicios del 20-N de 2011, porque con el recuerdo de aquel estrepitoso fracaso electoral ya tienen bastante. Debería quitar el tapón que impide que el cava y la alegría fluyan. O dejar claro al menos, que con tiempo o sin él para hacerlas, jamás será candidato si no lo avalan unas elecciones primarias realizadas para tal fin. En este sentido es revelador, el que prácticamente  todos los afiliados y simpatizantes que vengo hablado, siguen sin ver de nuevo a Rubalcaba encabezando la lista electoral, pensando asimismo que no se presentará, debido a que es consciente de sus limitaciones. En esta apreciación yo no coincido, porque sabemos de personas que no han sabido dejar los cargos a tiempo. Aquí, hasta al histórico Rodolfo Llopis hubo que desplazarlo; aunque Felipe, cuando defiende a Rubalcaba, no parece recordarlo. 

¿Qué se puede hacer? Llevo tiempo pensando que solo hay una salida. Dimisión en bloque de la Comisión Ejecutiva Federal, con el nombramiento de una Comisión Gestora para que organice un nuevo congreso y resurja una nueva dirección, con elecciones primarias abiertas -anteriores, pensando en la bicefalia- para elegir a los candidatos electorales. Algo parecido a lo que se hizo en mayo de 1979, cuando dimitió Felipe González, por los postulados marxistas al evolucionar hacia la socialdemocracia reformista, y que tan buenos resultados electorales dio. En la actualidad, la situación del PSOE es mucho peor que entonces. Por lo que el diagnostico ha de ser, operar sin pérdida de tiempo. Yo no sé si ahora la mejor sustituta sería Chacón, debido también a sus secuelas zapateristas que aún siguen perdurando. De todas formas, el proceso congresual clarificaría a los candidatos, siendo ella una más sin ningún privilegio establecido de antemano.

Como argumento para dejar pasar el tiempo alegremente, esperando el milagro de que el temporal escampe, se habla de nuevo de primero el proyecto. ¿Pero cuantos programas necesitan? Ha existido el de los dos candidatos anteriores: el de él, el de ella, las resoluciones del último congreso y las anteriores, tienen a su alcance el programa electoral triunfal del socialismo francés, el del resto de los socialdemócratas europeos. En dos tardes con dos vinos en Casa Labra, Pablo Iglesias haría otro, dado que es fácil saber lo que hay que hacer, cuando los españoles están sufriendo tanto, por la política antisocial y salvaje del PP. Se propone concebir un proyecto de “radicalismo reformista” -Rubalcaba-. Se dice, que el “PSOE debe volver a diseñar un proyecto de mayoría y apostar por las clases medias. Que se debe ir al centro” -González-. ¿Pero desde donde? ¿A partir desde la derecha actual, o cree que se esta en la izquierda, lo que sería un serio lapsus? ¿Pero que significan para un socialista las clases medias, la clase trabajadora lo es?

Sobre la postura de si girar más a la derecha o a la izquierda, la apuesta es muy sencilla. Como el propio Iglesias venía a decir, la sociedad la componen: “Los que tienen y pueden” y los que “no tienen ni pueden”. Así, los primeros siempre estarán unidos y defendiéndose como clase, sin necesitar mayor atención. Es en los segundos, donde el socialismo ha de volcar su rabia transformadora, teniendo el campo abierto tanto para apoyar a la clase trabajadora, como a la clase media trabajadora, que es el mayor abanico de votantes existente. Por eso, el PSOE tiene que estar siempre con su gente, con los que no tienen ni pueden, o los que tienen poco y pueden poco, para que tengan más y puedan tanto o más que los otros. No caben más galimatías. Los problemas surgen cuando hay dirigentes que les molestan los trabajadores. Hasta se piensa que se debe prescindir de ellos, acercándose a los salones de la señora marquesa, limpiando los zapatos al señor banquero. Cuando hay más criados que marqueses y más bancarios que banqueros.  

El trabajo se planifica pronto, reuniendo uno a uno a todos los colectivos en todo el país, para preguntarles que necesitan y ofrecerse con la mejor voluntad a conseguirlo. El partido tendría que estar diciendo todos los días, a viva voz, que cuando vuelva al gobierno, anulará los recortes antisociales del PP, y reimplantará los derechos perdidos. Eso sí, empezando por pedir perdón a los trabajadores por la reforma laboral que el ejecutivo de Zapatero hizo, marcando el camino a la calamitosa reforma-estafa posterior de Rajoy; a los jubilados por la congelación de las pensiones en 2011; a los funcionarios por reducirles los salarios sin consideración. Excusándose ante el pueblo español, por sus errores durante la crisis: por negarla, ocultar la pésima situación de la mayoría de las entidades financieras, al no destapar el elevado endeudamiento del sector privado, por la reforma de la Constitución para la “estabilidad presupuestaria”... con prioridad absoluta del pago de la deuda y los intereses.

El camino es duro, pero no hay otro recorrido. El PSOE está herido y urge sanarlo. Aquí  hay algunas ideas y propuestas para que la dirección lleve adelante la operación de cura,  si de verdad sienten en su ser el sufrimiento del partido, como nos ocurre a la mayoría de los militantes y votantes de base. ¡Salud! Y esperanza socialista siempre.

21.12.2012        Fernando Bolea Rubio
                              Sindicalista

jueves, 22 de noviembre de 2012

14-N: Gran huelga con la calle en pie


La segunda huelga general en menos de un año contra el Gobierno, ha sido como la anterior, un nuevo éxito de movilización para los sindicatos. La decadencia laboral y social que el Partido Popular ha generado y se prevé que originará, fue masivamente contestada por la clase trabajadora, rebelándose a las políticas a favor de los ricos y de los poderosos que esta fiera derecha impone. Como siempre, no faltan los detractores mediáticos pos huelgas que para servir a sus señoritos, hablan de fracaso y de mil rarezas, lo que a las trabajadoras y a los trabajadores les puede dar risa, porque saben mejor que nadie el alcance real de su digna, solidaria y eternamente respetable acción.

Si tal como queda demostrado en el artículo de este blog “29-M: Llama y voz de consenso”, la madre de todas las huelgas generales fue la del 14-D de 1988 y la de 29-M de hace nueve meses la siguió en importancia, ocupando merecidamente el segundo nivel del podium. A la de 14-N, hay que situarla a la misma altura de la última, dejándole ésta espacio para tanto honor. Evidentemente, las dos medallas de plata juntas adelantan en incidencia a la mejor, debiéndose considerar el año 2012, como el campeón de la lucha sindical y política contra un Gobierno. Si 1988, por el esplendor de su huelga, fue un año histórico para el movimiento obrero; 2012, por sus dos espléndidas huelgas generales, será otro hito de referencia sindical, al quedar marcado como el año más combativo en democracia hasta hoy. A Mariano Rajoy, siempre le acompañara esta mancha en su gestión. Por donde quiera que vaya, este lamparón deslucirá su corbata.

Yendo a los datos, de nuevo ha sido el indicador del consumo de energía del 14-N, de “Economistas Frente a la Crisis” (EFC), el que ha rebatido las cifras antisindicales oficiales, aclarando la incidencia de la huelga más realmente; aun no siendo la referencia de este consumo, un procedimiento exacto al depender según el momento de muchas variables. De acuerdo con el informe de EFC que, ha medido la evolución de la demanda eléctrica imputable a la actividad productiva en términos desestacionalizados, la adhesión al paro el 14-N se situó hasta las 24.00 en el 66,8%. En las anteriores convocatorias, el seguimiento al cierre de la jornada fue del 87,6% en el caso del 29-M y del 68% en la huelga de hace dos años. Así, se mostraría que el paro fue similar al de 2010 que se le hizo al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, un 1,2% mayor ese;  distanciándose más del 29-M, al haber sido teóricamente un 18,8% superior.

Las causas del descenso en el consumo de energía radican, de forma determinante, en las grandes fábricas e industrias. Según los sindicatos, estos sectores han parado de forma significativa, salvo el País Vasco, donde la convocatoria no ha sido apoyada por los sindicatos nacionalistas ELA -mayoritario- y LAB. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha aludido a este factor para poner en cuarentena que el menor descenso en el consumo de energía, se pueda traducir en una participación inferior a la huelga general de marzo. Méndez también ha señalado, que en esta ocasión hubo un millón más de trabajadores movilizados en servicios mínimos que en la anterior. EFC explican, a titulo de ejemplo, que “una caída del 20% de la demanda de electricidad podría suponer una caída del 100% de la demanda de electricidad que puede ser afectada por una huelga e indicaría que estábamos ante una huelga absoluta y no ante una huelga de sólo un alcance del 20%”.

En mi opinión, es casi imposible que las huelgas generales puedan tener mayor seguimiento. Si observamos los porcentajes de los paros, estos oscilan entre el 68% y el 87% de consumo de energía, con una corta diferencia de un 19%, en función -como hemos observado- de factores variables que se dan en unos casos y en otros no. El 14-D fue un éxito total; pero, “porque estaba de acuerdo la patronal”, ha dicho estos días el expresidente, Felipe González, que ahora hasta presume de que se le hiciera la huelga más trascendental. Evidentemente, no fue por eso. Sin embargo, hay que reconocer que alguna mínima influencia si debió tener, el que la derecha y sus coros de fan mediáticos, con un algún beneplácito empresarial, hostigaran la huelga intentando hacer dimitir al gobierno socialista, después de seis años en el poder.

Por eso y otros motivos, es ilógico que una huelga tan completa como esa se vuelva a dar. En los paros los trabajadores han estado y estarán siempre frente a la patronal (cuyo fin es que fracasen las huelgas) sin dejar que se inmiscuyan en sus acciones. Pero claro, el 14-D tampoco puede servir para desprestigiar las huelgas posteriores, al poderse alegar que las nuevas huelgas no han sido totales, porque no se ha parado el país, como en aquel caso; aunque las movilizaciones sean espectaculares y mayores a las que se realizan en otros países grandes como España. De todas formas, el 14-N fue una gran huelga, magnífica, como lo fueron las demás. ¿Que abrieron algunas tiendas? Sí, es cierto; pero me temo, que no sabían bien para que, porque si los minoristas no apoyan a sus clientes un día que lo necesitan, después estos pueden no defender el comercio de proximidad y salir perjudicados. Vi por TV a un comerciante con un palo en la puerta, que me dio la sensación de que se desafiaba a sí mismo.

Las manifestaciones de la tarde, fueron el mejor colofón conocido a un día de huelga. La calle se puso en pie, con ciudadanos de toda condición, familias enteras y sobre todo yendo mucha juventud... como llama de esperanza. Este Gobierno no puede atender las demandas del 14-N de los trabajadores y de la sociedad civil. Pero le voy a contar una historia. Ha ganado las elecciones por mayoría absoluta, hundiéndose por la abstención el Partido Socialista lo que le facilita gobernar. Sin embargo, ha de tener presente, que toda la tendencia progresista española continúa intacta, como lo demostraron las 200.000 personas que se manifestaron en Zaragoza. Antes, estas aglomeraciones tan espectaculares eran contra el terrorismo. Ahora en cambio, son contra el Partido Popular. No diré más. 

Sí me parece destacable, el grado de desorientación ideológica que se va notando, dado que el 14-D lo hizo sin ninguna duda la clase trabajadora y el 14-N parece haberlo hecho la clase media, como a muchas personas equivocadamente les gusta definirse ahora. Mal iremos, si empezamos así. Quizá por eso, procede recordar al histórico dirigente socialista y ugetista aragonés, Isidoro Achón, cuando escribió: “El descanso dominical, el descanso de un día cada siete, no se implantará, mientras la clase trabajadora no lo imponga por la fuerza de su organización”. “En las fábricas y talleres mueren la flor de la juventud; la mujer es explotada vilmente”. No perdamos las esencias de la cultura obrera. Con ella hemos llegado hasta aquí.

22.11.2012                                                                                                  Fernando Bolea Rubio
                                                           Sindicalista     

jueves, 8 de noviembre de 2012

Huelga de 14-N. Por el bien de todos



La inmediata huelga general de 14 de noviembre, tiene un nuevo significado y un fin más común. Si las anteriores han sido casi exclusivamente por cuestiones laborales, ésta también lo será, en clara lucha por la derogación de la vigente reforma-estafa laboral impuesta por el Gobierno popular, por sus devastadores efectos negativos para los trabajadores. Dado que no crea ni creará empleo como falsamente se aseguró, precariza la contratación no dando a la juventud estabilidad laboral en el trabajo, altera las relaciones laborales rompiendo los canales de negociación y entendimiento entre las partes económico-sociales, facilita el despido de manera vergonzante para las personas afectadas y el movimiento sindical. Todo lo cual hay que eliminar, limpiando la basura de la legislación para que sea de todos y no de parte, con etiqueta netamente patronal.

Pero si sólo lo anterior merece la más agria repulsa, en esta ocasión la protesta ha de ser mayor a otras y la reprobación más contundente. Expresada no exclusivamente por los trabajadores, sino por toda la sociedad con sus clases medias bajas y altas al frente,  porque la movilización tiene un componente más a modificar, la ideología radical de la austeridad. Sí, la política de contención total del gasto público que la derecha española y de la Unión Europea han impuesto; eliminando de raíz el crecimiento económico y la creación de empleo. El despilfarro si lo hay se elimina, pero no se debe prescindir del acompañamiento con fondos públicos a la economía cuando ésta se halla en recesión y sufriendo el país una atroz crisis bancaria y financiera.

Con el credo de la austeridad y la tijera de los recortes, mientras se salva a los bancos, España caerá más cada día y la población pagará las consecuencias, perdiendo el Estado del bienestar que mayormente es su único patrimonio. Es una vergüenza que a mí me produce hastío, oír hablar a los jóvenes en los autobuses diciendo ellos y ellas que se van a ir a buscar trabajo fuera del país, porque aquí no hay nada. ¿Hasta que extremo hay que aguantar para saltar? Los ejemplos de Grecia y Portugal los tenemos a la vista, el que no los quiera ver que no mire ya que pronto los sufrirá. 

Que los gobiernos sigan con sus presupuestos míseros y de raquitismo inversor, si así sueñan con luces y campanas de recuperación económica, cuando casi nadie las oye sonar y se sabe que ningún país ha salido de la crisis con austeridad. España sería el primero en hacerlo. Pero al menos, que pongan cinco euros en una cuenta para políticas de crecimiento, con generación de empleo en nichos adecuados de actividad; porque la austeridad, debe tener una línea paralela de crecimiento, para salir del pozo de la recesión, e ir acabando con el paro. Generando actividad al objeto de que no se vayan y regresen esos jóvenes que, expulsan la crisis y la política económica errónea de la Cancillera Angela Merkel y la del Presidente Mariano Rajoy.

No es pedir demasiado. Simplemente, que se aplique en España y en Europa el tipo de política económica con tintes keynesianos que Barack Obama realiza en Estados Unidos, que aún sin ser la ideal, después de superar la crisis de las hipotecas subprime, de la banca, del automóvil, esta creciendo y situando el paro en un 7,9%; haciéndole ganar las elecciones presidenciales, para satisfacción de las capas mas desfavorecidas estadounidenses y de la izquierda mundial.

Es cierto que allí tienen la Reserva Federal y no un Banco Central Europeo malo como aquí, con una moneda propia que controlan y no el euromarco que gobierna esta zona a voluntad germánica. Ante este abuso avasallador, desde la política se calla, se obedece, se asiente con complacencia. Sin embargo, el sindicalismo europeo ha dicho basta, al convocar la Confederación Europea de Sindicatos (CES), una jornada de Acción y Solidaridad Europea el 14-N, con huelgas y movilizaciones en todos los países; en contra de esta lacra de la austeridad que, los gobiernos ejercen con las consecuencias antisociales e inhumanas conocidas, para exigir otra forma de política y de vida. 

Los mayores, los jóvenes, profesores, alumnos, parados, jubilados, el tendero, la carnicera, los trabajadores, autónomos, los pequeños y medianos empresarios, los ejecutivos, profesionales liberales, en concreto el 99% de la población que necesita lo que el 1% tiene, según afirma el Nobel Joseph E. Stiglitz, tendría que salir a la calle y alzar la voz en pro de la rectificación y el cambio de orientación económica que se necesita y reclama.

No conozco a nadie que este a favor de la austeridad sin más. Ni los empresarios la defienden. Todo el mundo entiende, que a la vez debe haber crecimiento y estímulos públicos para que progrese la economía. Así, se ha de entender que esta huelga es en beneficio de todos y a una hemos de responder. Nos dejan sin futuro. Hay culpables. Hay soluciones. ¡Vamos!


8.11.2012                                                                                                  Fernando Bolea Rubio

                                                                                Sindicalista

jueves, 27 de septiembre de 2012

Balance de la reforma-estafa laboral


Ha pasado el tiempo de maduración y a siete meses de su floración, la reforma laboral del Partido Popular solo produce fruta amarga. Los sindicalistas ya dijimos lo que iba a pasar, pero este Gobierno no atiende, impone. Sólo escucha las campanas patronales y financieras de alto copete y la ministra de Empleo hace valer sus insignes rapacerías.

Ahora consumen el mal fruto, soportando la desestimación en las encuestas electorales. Si rectificar es de sabios, podrían cortar el árbol y acabar con parte de sus penas; mas para anular esta ley, tendrían que ser inteligentes que no lo son y actuar antes de que la hoguera arda de nuevo. Así, si además del Presidente se tuviera que destituir a una ministra, yo mismo puedo dar el nombre: Fátima Báñez, azote de obreros, lágrima del poder, pésima gestora. Con gobernantes así, de europeos del sur pasaremos a ser africanos del norte.

Es inasumible lo que se ha hecho y el movimiento sindical no debe permitir por más tiempo tanta bajeza. Una vez más, la derecha basó la trama de la reforma en la creación de empleo. Siempre ocurre lo mismo, cuando se destruyen derechos de las trabajadoras y los trabajadores, en todos los casos los Gobiernos de todas las ideologías los justifican con el mismo fin: por el paro... los jóvenes... Así fue en la reforma de Zapatero y lo ha vuelto a ser en la de Rajoy. El resultado es eternamente idéntico. Nada de lo prometido mejora, pero la clase trabajadora va sufriendo una degradación de sus derechos tras otra, quedando a la espera del próximo embuste. Estos días, los titulares de prensa son concluyentes: “La reforma laboral cumple seis meses sin frutos”, “La reforma ha empeorado las condiciones laborales”, “La reforma laboral no consigue ningún efecto positivo en Aragón, diez mil contratos menos y 596 ERE más son el efecto de la reforma”. 

A este respecto, un informe elaborado por UGT indica, que en el periodo de vigencia de la reforma laboral (10 de febrero de 2012) respecto al mismo periodo del año 2011, la contratación en general ha caído en un 4,4%; los contratos indefinidos, el 5,8%, y los temporales, un 4,6%, todo un récord en un país con altas tasas de temporalidad. La proporción de contratos indefinidos sobre el total de contratos alcanzo la cifra más baja en agosto de 2012: 6%, antes el 11% y pico. Caen las conversiones en indefinidos en un 14,3%. El contrato para emprendedores, presentado como medida estrella a favor de los jóvenes, se ha deshinchado porque apenas llega al 0,7% del total y el 15,6% de los indefinidos ordinarios (categoría en la que se encuadran), el 9,5% del total de los contratos indefinidos. Han aumentado los despidos voluntarios de los trabajadores, al quererles cambiar las condiciones y bajarles los salarios. El paro registrado desde agosto del 2011, hasta el mes pasado, ha aumentado el 12%. Crecen los desempleados en un 17,8%. Cae el número de ocupados un 4,8% respecto al año anterior. Desde febrero, los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) han subido el 88%.

De modo que, la reforma laboral no crea empleo, todo lo contrario, se superan tasas históricas de paro. Precariza y desestabiliza la contratación. Han caído los contratos temporales y los indefinidos. Aumentan los despidos individuales y colectivos. Los salarios han bajado. Desciende el número de convenios colectivos. No ha facilitado la inserción de mujeres y jóvenes. La flexibilidad interna apenas existe. Siendo singular e intolerable, el que la patronal CEOE, la gran defensora y paladín de la reforma al argüir que, acabaría dando una patada al desempleo; pronostique actualmente, que el paro escalará al 25,2% en 2012 y al 26,5% en 2013, tras rozar la cifra de seis millones de parados. Para el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer: “La reforma no ha supuesto ningún estimulo para la creación de empleo. Esta no era la reforma más urgente que necesitaba la economía, sino la del sistema financiero, ya que crear empleo depende de la actividad económica y ésta de que fluya el crédito”.

Así es. En todo caso, la reforma laboral debió unir flexibilidad productiva con estabilidad laboral a prueba de crisis, con un sistema de participación compensada de los trabajadores en la empresa, tal como inicialmente contemplaba el acuerdo laboral suscrito unos días antes por los agentes sociales y que el Gobierno ignoró erróneamente. En el II AENC 2012, 2013 y 2014 (Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva) de 25 de enero de 2012, las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME, y las sindicales UGT y CCOO, ponían de manifiesto que el espacio propio de la flexibilidad interna es la negociación colectiva, puesto que comporta instrumentos idóneos para el mantenimiento de la actividad productiva y el empleo.

De tal forma que el AENC establecía, que el convenio colectivo deberá regular criterios, causas, procedimientos, para la movilidad funcional y la distribución irregular de la jornada de trabajo en el ámbito de la empresa, con la participación de la representación sindical. ¡Que sería hoy de GM España, si no hubiéramos pactado varios acuerdos en este sentido! Con el rechazo de esta modernización laboral y la entrega de la casi totalidad del poder de decisión a la parte empresarial con la reforma, el Ejecutivo de Mariano Rajoy y el desarrollo de las empresas perdieron una oportunidad histórica. Ha sido una reforma en contra de la voluntad de las partes, que ni los empresarios de verdad la quieren. Aplicando su filosofía, he oído decir que ni estando loco, un banco hará un convenio propio. Con la reforma, el único objetivo que buscaban era rebajar los salarios y las condiciones laborales. Todo ha sido una reforma-estafa para los trabajadores y nada más. Sí, que la ministra y su impulsor se vayan.

Sin embargo, tal como vengo observando ni los trabajadores ni la Unión General de Trabajadores, van a olvidar el agravio de la reforma. Hasta el momento, en contra de ella se ha hecho la huelga general del 29-M (marzo de 2012); se va a continuar con movilizaciones sostenidas en el tiempo; se ha reiterado el escrito de solicitud a la Defensora del Pueblo, para que tramite el recurso de inconstitucional de la reforma ante el Tribunal Constitucional y las denuncias ante la OIT.

Pero los sindicalistas y los sindicatos pueden hacer más, en las empresas y desde las empresas. Por eso me agrada que UGT  haya iniciado una fuerte ofensiva sindical desde el interior de las firmas, elaborando una Guía Sindical de orientación general, para continuar expresando el rechazo a la reforma laboral impuesta. Evitando a la vez, sus desfavorables efectos e introducir los avances del AENC, que está en vigor y cuyo cumplimiento se va a exigir. ¡Se quiere revertir la reforma! Este es hoy el fin sindical común. El Gobierno esperaba que los sindicatos pasaran página. Ellos ya han renegado de decir que la reforma crea empleo. Pero el movimiento sindical ni olvida ni perdona. No se van a dejar desprotegidos a los trabajadores, mientras la reforma esta vigente.

Con la política de austeridad la derecha quiere acabar con el Estado del bienestar. Con la reforma laboral intentar terminar con el Derecho del Trabajo y el Estatuto de los Trabajadores. Habrá otra huelga general.


A Santiago, la última esperanza  


Estos días nos ha dejado Santiago Carrillo. Él fue durante la dictadura la esperanza de muchos luchadores contra el caciquismo, la miseria, la opresión. He sentido mucho su muerte. Le recuerdo oyéndole con la radio baja a temprana edad. ¡Ya verás cuando venga Carrillo! oía decir. Guardo en gran estima su libro de memorias, con una dedicación de su puño y letra que dice: “A mi compañero Fernando, del metal, con el afecto de Santiago Carrillo”. En marzo de 1989 tuve la satisfacción de invitarle a impartir una conferencia titulada: “Los sindicatos y la izquierda en la España de hoy”, en el Club de Opinión 14-D que en UGT-Metal Zaragoza formamos. Fue una tarde maravillosa y su mensaje de plena actualidad hoy en día, al afirmar: “Sólo los sindicatos siguen en la izquierda”. Adiós, camarada.


27.09.2012                                                             Fernando Bolea Rubio
                                              Sindicalista    

viernes, 7 de septiembre de 2012

Euro... ¿Sí o no?


Los pros y los contras de los efectos del euro, están llegando a la mesa de discusión de los españoles. En mi caso, con un brote de convicción de que con su llegada vivimos un espejismo. Prometía mucho y lo ensalzamos más. Vino, y sin más entregamos la peseta, el Banco de España quedó noqueado. Pero era igual, podíamos cruzar los Pirineos sin cambiar de moneda y seis mil euros eran todo un millón. Por fin, éramos un país rico, nuestra moneda valdría más que el dólar. Solo nos faltaba hablar inglés para conquistar el mundo. Aunque con el redondeo del cambio (en vez de 0,70-1) llegó el primer desengaño amoroso.

A las lágrimas de esa picardía se unió la lluvia ácida de los poderes financieros-políticos reales, que se han ido quedando con el control de la nueva moneda y con el mazo de la devolución rápida de la deuda pública; junto con la imposición del aval del Estado en las bancarias y privadas. Así, se debe revertir la consideración fantasiosa inicial, al intuirse hoy con el euro un futuro peor, atroz para muchas personas. Yo ya miro el euro con desdén, con desconfianza. Mi fidelidad plena, se empieza a romper. El primer ministro eslovaco, Robert Fico, ha declarado: “Veo una ruptura del euro tan realista como la permanencia, 50% a 50%”. Con lo cual reconoce que el euro ha perdido su seguridad. Su continuidad es ya dudosa al menos para todos los países, al estar siempre Grecia en la puerta de salida; como en entredicho están lo que los salchicheros llaman países oliveros del sur.

¿Se perdería mucho con la vuelta a la peseta, fuera el que fuese su valor? Los ricos sí,  los pobres no. Como nada o poco tienen, nada o poco podrían perder. Su único patrimonio es el Estado del bienestar. Pero claro, si seguir con la sustraída y manipulada moneda es perder ese estado social, como ahora ocurre con los recortes; el euro se hace odiar y deja de interesar. Lo siento por él, pero mi tarjeta de sanidad... me gusta mucho más que el euro. No lo puedo remediar. Hemos de saber que nos regimos por un euro alemán, no del conjunto de la Eurozona. Por un euro de parte, no con el de un todo con un fin general. En consecuencia, si los alemanes quieren ser europeos como medio al servicio de sus intereses; esa Europa no me interesa. Si se beben el agua pasando el sur sed, que se bañen en su río, pero no con nuestra agua y complacencia.

En mi opinión, tres  motivos son las causas del incipiente fracaso del euro en España. Uno, que es una moneda que nació con favorables objetivos políticos, sociales, de unidad, grandeza; siendo su gran drama posterior el que, por la cortedad de los dirigentes actuales, ésta no se haya desarrollado en toda su intensidad, con un euro bien instaurado con su Banco Central Europeo propio -no como el actual que en realidad es alemán-, su unión fiscal, bancaria, económica y hasta política en cierto grado. Dos, la política económica conservadora de austeridad, carente de generación de empleo y de crecimiento; que ha hundido el consumo, tanto como la recaudación fiscal. Tres, por haber surgido capitaneados por Alemania, los poderes financieros ocultos, los poderes reales que controlan la economía y la política del momento, imponiendo a los países miembros déficits presupuestarios sobrenaturales. Porque su principal interés es, el que esos estados paguen a toda prisa lo que deben, principalmente a la banca alemana -aquí más por el ladrillo y el problema bancario-; aunque para ello, agoten la casi totalidad de la riqueza anual que sus economías generan. Sin dejar margen para la recuperación, la inversión pública, el relanzamiento de la economía productiva, la sostenibilidad del conquistado Estado del bienestar, como en España ocurre.

Por consiguiente, en estas condiciones el euro no me interesa, no lo quiero, lucharé en contra de él. Debido a que esta llevando el país a la desdicha más absoluta y a la población a un retroceso inimaginable. ¿Qué sin el euro también ocurriría? Hay diferentes opiniones al respecto. Si estoy totalmente seguro de que, con la trayectoria actual de un rescate o fracaso tras otro, el euro que conocemos acabará llevándonos a la desastrosa situación económica y social de Grecia: con un desempleo galopante, más reformas laborales, reducciones salariales, agotamiento de las pensiones. Para finalmente tener que abandonar el euro por voluntad ajena o propia, al no poder vivir con él, como allí puede ocurrir. Y, por supuesto, si esto va a pasar, cuanto antes suceda mejor. Esperar más y salir peor, sería de necios.

¿Puede recomponerse el euro actual, para que resulte viable y atractivo para todos los europeos? Sin duda, si hubiera voluntad y capacidad política para hacerlo. Para ello, no tendría que haber países que manden y otros que obedezcan, el poder político se ha de imponer al de los mercados financieros, se gobernará para los ciudadanos, a los gobiernos que lo deseen se les dará más tiempo para obtener los objetivos de déficit presupuestario, al objeto de que sus economías pueda respirar y sobrevivir. Su estructura operativa será igual a la de la libra o el dólar, a lo que son las monedas de verdad. ¿Pero esto quién lo hará? ¿Qué países se enfrentarán a los alemanes, para arrebatarles el cetro? Rajoy por descontado no. El socialista Hollande camina muy despacio.

Por lo que hay que llegar a la conclusión, de que por el deterioro político e ideológico gobernante, el euro no se va a rehacer. Y en caso de hacerse, al menos hasta dentro de diez años no se van a corregir los defectos actuales. Antes habrá que pagar los pufos de los bancos. Opel España no contempla una mejoría del mercado español, al menos hasta el 2016. ¿Y en el 2022 que quedará del país? ¿Hasta donde habrán desaparecido las ventajas sociales actuales? ¿Como será el balance del deterioro del poder adquisitivo y la pérdida de derechos? Puede que no quede nada. África puede empezar en los Pirineos. Si se sigue analizando que esto va a ocurrir, lo más coherente y necesario será poner remedio a tiempo. Debiendo ser motivo de preocupación y acción sindical.

Sobre la continuidad o no de España en el euro, Luis Garicano, Jesús Fernández-Villaverde y Tano Santos han escrito de manera radical: No queremos volver a la España de los 50. Como la única financiación que entra en el país viene del BCE, si España se saliera del euro no tendría ninguna fuente de financiación. Todos los productos importados subirían de precio. Las empresas globales suspenderían pagos con sus proveedores y perderían sus relaciones con los clientes. Al aumentar la carga de la deuda, empresas, bancos y sector público se enfrentarían a la bancarrota. La España que rebotaría sería la España de los cincuenta, con ingresos bajos derivados del turismo, baja productividad, bajos costes. Para Carmen Alcaide: Sería difícil evitar la posible huida masiva de capitales del país (ahora ya lo hacen). Lo peor de todo es que España no resolvería los graves problemas de su economía (y así tampoco).

Antón Costas ha profundizado en el mal, al afirmar: “El euro es utilizado por Alemania como un instrumento de dominación cuasi neocolonial. O se hace del euro una verdadera moneda común, con su banco central merecedor de tal nombre, o no tiene sentido seguir con este malentendido”. 

Para algunos analistas, la mayor ventaja de la salida del euro sería la devaluación de la nueva moneda, que se estima entre el 30% y el 50%. Coincidiendo ese porcentaje, con el que tasan los neoliberales de, Angela Merkel y de Mariano Rajoy, que se deben reducir los salarios y el gasto social en España para que el país sea competitivo, debido a que el euro no se quiere devaluar. Así pues, solo quedan dos soluciones: O tenemos una moneda que los propios españoles puedan depreciar y controlar; o seguimos en la deficiente vida del euro y perdemos sobre el 40% de nuestro nivel de vida. Por tanto, o devaluación de la moneda en perjuicio de los poderes financieros locales, o devaluación del Estado del bienestar en menoscabo del pueblo. Yo optaría por el primer supuesto.

En vista de lo cual, si me preguntarán: ¿Euro sí o no? Mi contestación sería radical: Este euro ¡No! Que los ricos se queden con él. Yo quiero un euro que beneficie también a las clases media y baja. Y, si no es así, no me interesa.

La socialdemocracia dejó la economía en manos de los liberales. Ellos la cedieron a los ultraliberales. Y estos a los financieros, la banca y los mercados. Así la política se ha ido perdiendo. Ya no manda ni dirige. Es el dinero el que gobierna Europa. Siendo el euro malo que nos ocupa, una consecuencia de su devastador poder. Que a los poderes reales, se los lleve el viento. 


7.09.2012                                                                                                             Fernando Bolea Rubio
                                                                    Sindicalista        

lunes, 6 de agosto de 2012

La calle releva a Rajoy


Si el pasado verano la disyuntiva era crecimiento o desastre, en este solo cabe pensar en como salir de la catástrofe, porque a ella hemos llegado por el enfoque económico de  austeridad sin estímulos y los errores. Ahora, según un pedagogo distraído, solo queda: Pobreza, degradación... y violencia policial. ¿Que bien verdad? ¿Pero quién tiene la responsabilidad de todo esto? ¿Los gobiernos piensan acaso, que pueden cometer mil tropelías sin que la sociedad les pida cuentas? Del vergonzoso estado actual del país, tienen mucha culpa los tres últimos gobiernos. Dos del PP y el penúltimo del PSOE. Así que ambos partidos tendrán que adjudicarse su parte del daño, empezando por pedir perdón al pueblo español.

Además, Bruselas esta ridiculizando a España, a la vez que lo hace a sí misma, al navegar como una pajarita de papel en el agua, porque no tiene poder y su autoridad política es nula. La misma canción tararea el Banco Central Europeo, con un paso para adelante y dos para atrás, al resguardarse del frío del norte, con su capital dominante y manipulador. Los demás cantores, no tanto Francia, son el resto de los países comunitarios. Menos uno, Alemania, en el que los neoliberales, con una avaricia extrema por lo suyo y con cuatro directrices simplistas, del tipo en el sur fiesta y siesta, está gobernando la Unión Europea a su capricho y beneficio. Al quedarse -por las deudas que le han contraído-, con el dinero de la hucha que van generando los países periféricos como el nuestro, en favor  de sus capitales financieros. Mientras castigan a las capas populares y trabajadoras, tanto alemanas como foráneas.   

Ante tanta manipulación, humillación de la política, injusticia social, degradación de la sociedad, al imponerse una clase contra las otras por el dinero y la política a su servicio, ¿los sindicatos europeos cuando reaccionarán de verdad? Supongo que será demasiado tarde, el día que se den cuenta realmente de la gravedad de la involución que capitanea el supercapital y la derecha en España, Alemania, en Europa. ¿Hasta cuando se va a aguantar esto? ¿En qué ha quedado la valiente y justa Europa? ¿Qué destrozo ha hecho en ella el ultraliberalismo, para que nadie se atreva a imponerse al dueño financiero y político alemán?

En España, habrá que empezar a gritar: ¡Sometidos nunca! Y, ni vagos, ni cabezas cuadradas como llaman a los alemanes; sino buenas personas, trabajadoras, inteligentes y competentes. Aquí hay más seriedad, profesionalidad, honestidad y grandeza, de la que los germánicos pueden imaginar. Llamarnos gandules es para ellos una treta y para nosotros un insulto. Que el Gobierno lo evite o habrá que hacerlo una a una con todas las personas de ese país a nuestro alcance. ¡Qué es eso de vagos! Desprestigia a quien lo dice. Ya vale de tanta miseria y de tonterías. Si quieren seguir saqueándonos, que busquen otra coartada.

Lo real es que, interesadamente y con poco criterio, la banca de inversión alemana prestó mucho dinero a la española -según el profesor Vicenç Navarro, en 2.009 los alemanes habían prestado la enorme cantidad de 704.000 millones de euros a España, Grecia, Irlanda y Portugal-; en nuestro caso, para el gran negocio especulativo del ladrillo. Ese que el Partido Popular inició en 1.996, sin que el PSOE en 2.004 ni después lo supiera cortar -ahí esta su culpa-; lo que ha terminado agravando sobremanera la crisis y semiagotando económicamente el país. Obligando al Ejecutivo a tener que solicitar en la Eurozona un vergonzoso y humillante primer rescate de la banca, de hasta 100.000 millones de euros -aunque solo hay comprometidos 30.000-, principalmente para pagar la deuda alemana. Sin embargo, en esa grandiosa operación prestamista, los alemanes no pierden nada. Ganaron mucho, como toda la banca que probo el pastel; pero al acabar la fiesta, no quieren pagar ni un solo plato roto. Únicamente piensan en recuperar el monto de lo prestado, sin apreciar que cada inversión conlleva un riesgo, con la obligación de cubrir las perdidas con las ganancias obtenidas.

Por tanto, que Alemania se comporte con España con menos prepotencia y más respeto, dado que ellos también tienen especulaciones españolas que perfumar. Es seguro que con un Presidente y un Ejecutivo competentes, a España se la trataría formidablemente en el mundo, como ha ocurrido en los últimos treinta y cinco años. Con Felipe González estas afrentas no se dieron. Influyendo sin duda, el prestigio que alcanzó, al llegar a ser una de las tres personas más influyentes en la Europa del momento. Claro que él por lo menos hablaba francés y se podía entender con los demás por los pasillos.

En relación a las valoraciones políticas, es indudable que el desastre económico creado  se va a llevar por delante al Partido Popular. La gravedad es tal, que solo caben soluciones ejemplares e inmediatas. El clamor en la calle es general, expresando el rechazo a la gestión del presidente Mariano Rajoy, considerándose que debe dimitir sin llegar ni tan siquiera a Navidad. Si no se va, la calle lo relevará, porque se siente engañada y estafada por él. Y cuando esta marea de la opinión pública se da, solo cabe irse en el primer autobús. Yo no he visto nunca un rechazo tan colectivo y tan fuerte. Puede ser pronto o más tarde, pero su carrera política está tocando a su fin. Por miedo a las protestas por sus recortes, ya no se atreve a salir de los despachos, e incluso cambia de fecha los mítines. El propio Partido Popular esta movido, a la espera de acontecimientos. Hasta algunos ministros se mueven ante los focos, llevados por su ambición sucesoria.

Actualmente, el Presidente dice que le preocupa que le exijan más recortes en las pensiones. A juzgar por gente que le rodea, es una expresión en su línea de que nunca asume sus decisiones y siempre busca culpables. Primero fue Zapatero, ahora Angela Merkel. Según sus críticos populares e informa El País, en estos días ha decidido dejar claro que todo lo que hace es obligado por Alemania, sin gustarle lo que esta haciendo. En mi opinión, este es un autentico estilo de cobardía presidencial. Lo que haga que lo asuma o que deje el Gobierno. España no puede continuar con un Presidente embaucador que no dice la verdad, porque este país es moralmente mucho más grande que él. Las pensiones se van a recortar y se hará totalmente por decisión y orden de Mariano Rajoy, de nadie más, ni alemán ni escocés. Felipe González acaba de declarar: “Siempre hay libertad para elegir un camino u otro”. ¿Por qué no deja en paz a los viejos y persigue el fraude fiscal; empezando por los ricos e imponiéndoles algún impuesto, que hasta ahora no lo ha hecho? Ni lo hará. 

La democracia en peligro

Que se vaya con su revolución conservadora: En estos días, con un ataque despiadado contra el aborto, al suprimir la irrupción voluntaria del embarazo de la ley de 2.010, para retroceder a una peor que la de 1.985, al eliminar los supuestos de violación y malformación del feto, dejando sólo el daño psíquico para la madre. Al desear la práctica eliminación de la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, al haber borrado de la misma las referencias a los prejuicios racistas, xenófobos o sexistas; la cual era una de las leyes más progresistas, del gobierno Zapatero. Han empezado con estratagemas centralistas, contra la existencia de las Comunidades Autónomas, que nunca han gustado a la derecha de Madrid.    

Asimismo, el marianismo acaba de dar un escandaloso golpe de mano en los medios públicos, cesando a los principales lideres de audiencia de radio nacional y TVE: Juan Ramón Lucas, Toni Garrido, Xabier Fortes, Ana Pastor; sustituyéndolos por personal allegado de segundo nivel. Todo ello, cuando de la mano de Fran Llorente (exjefe de informativos) y con profesionales de la talla de Pepa Bueno, estos entes habían llegado a ser totalmente plurales e independientes. Acaparando innumerables premios, al haber llegado a ellos la libertad informativa, impulsada elogiosamente por el ejecutivo socialista anterior. Algo que iba muy bien debido a su imparcialidad, se les ha arrebatado a los ciudadanos por intereses electoralistas del Partido Popular. Echando fuera de esos servicios informativos, a millones de españoles que no los quieren oír ni ver porque quieren profesionalidad y calidad periodística. Entre otros motivos, porque aborrecen la manipulación sufrida, durante los cuarenta años de dictadura. Los progresistas de este país ya venimos manipulados, llorados y meados y no admitimos ninguna vuelta atrás. Se dice que la Moncloa “tiene alergia a las tertulias”. ¿Tanto miedo tienen de perder las próximas elecciones? ¿Tan perdidos se ven? Que metan su radio y TVE-PP en conserva. Por mí, las pueden apagar (no cerrar) y hasta pintar de azul con su color sistema.

Así las cosas, tenemos que empezar a pensar, que la democracia esta en peligro, haciendo llegar el mensaje a la juventud. Como antes, los niños no van a recibir una educación  innovadora, las jóvenes al igual que sus abuelas no van a poder abortar, los medios de comunicación públicos han sido censurados, los trabajadores han perdido la mayoría de sus derechos. Habrá que desempolvar los viejos vocabularios de conquista democrática y volver otra vez a luchar por ella. Chavela Vargas, esa magnifica mujer y cantante mejicana que, tristemente acaba de fallecer, decía que “España es la novia de Europa”. A mí me parece un calificativo precioso. Que puede ser así, por la hospitalidad, ánimo y simpatía de los españoles; así como por la belleza, luz y claridad del país. En recuerdo a ella, no podemos perder ese honor, por mucho que la derecha  quiera volver a vestir de negro la nación; cerrando las fronteras otra vez, con la llave de la perdida de la libertad. He oído decir, que la luna se ha quedado triste, porque ya nadie cantará a su luz.       

En términos sindicales, hay que observar con suma atención lo que ocurre en Grecia. A veces llego a pensar que, ese país es hoy un auténtico campo de pruebas de resistencia, al que lo somete el capital gobernante, para saber hasta que punto aguantan las clases media y baja, antes de invadir las calles y romper el orden establecido. El medio utilizado sería la eliminación continua del conquistado Estado del bienestar, con recorte tras recorte, provocando a la gente, hasta que la desesperación le haga saltar. Con lo aprendido allí, podrían aplicar la experiencia en otros países. Pero claro, esa sería la práctica en un país pequeño y necesitarán también la de uno grande, que muy bien podría ser España. ¿Nos habrán elegido a nosotros para este segundo estudio? Si ha sido así, el Gobierno estará colaborando en él, porque ese objeto casa con su ideología extrema. Que no nos cojan desprevenidos, porque los españoles volverían a sufrir durante décadas, la vil y más cerril explotación de los poderosos.

En cuanto a la austeridad por encima de todo que el Gobierno predica, con la colaboración desde los púlpitos de la Iglesia; en el presente, con alguna oposición obispal. Emilio Ontiveros acierta al asegurar: “Sin crecimiento económico no se pagan las deudas”. Siendo asimismo clarividentes las aportaciones del premio Nobel de Economía de 2.001, Joseph Stiglitz, al decir: “Ningún país ha salido de la crisis con austeridad, solo empeora las cosas. Es necesario generar crecimiento para estimular la demanda, algo a lo que no contribuye la reforma laboral en España”. Yo diría las reformas, la del PSOE y con mucho más motivo la del PP, como tantas veces se han censurado y enmendado en este blog. Cuantas menos expectativas de crecimiento y de recaudación tiene España, más alto paga los intereses de la prima de riesgo. ¿Por qué el Ejecutivo no dice esto, si lo sabe y así lo entiende todo el mundo? El mantra del PP de la austeridad es una canción muerta, que refleja bien Cándido Méndez cuando indica: “El Gobierno está en la tumba y escarbando hacia abajo”.   

Amargamente, el paro ha batido la tasa récord del primer trimestre de 1.994, al situarse en el 24,63% de la población activa, en 5,7 millones, según la EPA de junio. En Aragón alcanza al 18,6%, con 122.300 personas. Estos datos son un récord y una desgracia tremenda, que con este Gobierno en vez de atajarse, cada día se empeora más. Según UGT, se esta produciendo una “destrucción masiva de empleo”.Y la ministra de empleo sin dimitir. Aunque no pierde el tiempo. En estas circunstancias, se cree que va a eliminar la que se puede llamar la Paga del Hambre, conocida como Plan Prepara, de 400 euros al mes (antes 426). Esta ayuda no se puede quitar, porque es la única que  permite comer pan a 50.000 parados al mes, a 600.000 en un año, que ya no tienen prestación de desempleo ni subsidio. Sería una auténtica canallada que lo hicieran, pero lo harán. El Ejecutivo en pleno, tendría que estar un día sin comer, para que supiera lo que es pasar hambre.                 

Mientras Rajoy, degustando el marisco de Galicia, abre la puerta al segundo rescate. Al que pueden llamar pimiento frito, pero será un rescate más. Y así, uno tras otro, hasta la inoperancia total. En septiembre, el país saltará.


6.08.2012                                                                                                            Fernando Bolea Rubio
                                                               Sindicalista       

viernes, 13 de julio de 2012

Revolución conservadora en dura intervención


Vistos los resultados después de siete meses del Gobierno popular, la valoración suya más exacta que puede hacerse desde el sindicalismo y la izquierda es, que la derecha esta gobernado exclusivamente para su clase: los capitalistas, empresarios, banqueros, personas adineradas, altos ejecutivos, funcionarios de élite, la jerarquía de la iglesia; siendo ese su único fin e interés. Este partidismo clasista, lleva a la clase más vulnerable hacia la miseria, a los trabajadores a la eliminación de sus derechos y a la radicalización por honor -como revulsivo a la imploración que sin duda sus enemigos desearían-, a la clase media a vivir sujeta y cada vez peor.

Sin pérdida de tiempo, hizo un primer regalo a las patronales con una reforma laboral salvaje, desde hacia años anhelada por ellas y los malos empresarios, que ha desvirtuado el mundo del trabajo. Dando a las relaciones laborales una vuelta al revés, para sumirlas en la indefensión de parte y en la desprotección. Anulando de paso o hiriendo, los avances de participación compensada de los trabajadores en la empresa, que tan buenos resultados comunes estaban obteniendo. Esa reforma que es mala, desastrosa, para los asalariados, las empresas, el país; solo ha servido para abaratar y facilitar el despido, incrementando el paro hasta rozar el 25 % y dejando las empresas semivacías o cerradas. La desgracia del alza del desempleo, debía ser una vergüenza para el Partido Popular, sus ideólogos ultraliberales de FAES, Mariano Rajoy y la indocumentada y provocadora ministra responsable Fátima Báñez. Esta última, dedicada ahora de forma partidista e irresponsable, a filtrar a un medio afín, la documentación reservada de un expediente de regulación de empleo, instado por el PSOE en su ministerio.

Esta reforma es un autentico desastre. Un paso atrás para el fortalecimiento de la economía productiva, para la mejora de la productividad, para todos los negocios en su conjunto; dado que supone tanto, como desconfiar de la capacidad y la profesionalidad de los trabajadores, de las personas, relegándolas a simples sujetos tayloristas en su método dictatorial de desconsideración humana. Por descontado, esta reforma no era necesaria ni conveniente. Su implantación solo obedece, en mi opinión, a que aprovechando la crisis, Mariano Rajoy esta implantado descarada e injustamente una rancia revolución conservadora que, colma su ideario ideológico,  llenando los bolsillos de los más pudientes, relegando a los necesitados. A este hombre se le ve feliz, cada vez que la caída de la economía, le permite argumentar un nuevo recorte social. Es como si pensara, otro euro que voy a quitar a un pobre, a otro viejo que le voy a robar el bastón.  

El siguiente paso esta siendo, la eliminación progresiva del Estado del bienestar. Si lo permitimos, pronto se atreverán a decir, que ya no existe porque no se podía mantener y zanjarán el asunto. Están anulando las subvenciones a la dependencia (a los mayores), para antes de acabar la legislatura abolirlas definitivamente, derogando la ley. Eliminan ayudas a discapacitados, para que realicen trabajos apropiados fuera del hogar, limitándolos a quedarse en casa, mirando todo el día por la ventana. Lo cual es un recorte roñoso y repugnante, propio de políticos incapaces y de gente sin corazón. Lo mismo, que hacer pagar una parte de los medicamentos a las jubiladas y jubilados, cuando algunos de ellos, a partir del veinte de cada mes ya no pueden comprar el pan, o no tienen bastante dinero para calentarse en invierno. ¿Muchos abuelos, si tienen que elegir entre comer o calentarse y pagar un medicamento, que decisión tomarán? 

Su fijación continua ha sido, atacar con toda su sinrazón a la sanidad y a la educación. Allí, el objetivo es doble. Por un lado, disminuir el gasto público como su teoría enfermiza les marca. Por otro, reducir el servicio, dejando hueco para que la iniciativa privada se meta en él para ganar dinero. Ante lo cual, surgen dos observaciones. Una, si la derecha no cree en la actividad pública, ¿para qué se presenta a las elecciones para gestionarla, si en realidad la quiere eliminar? Otra, ¿qué clase de empresarios son esos que, solo saben hacer negocios, si se los arrebatan a la Administración? ¿Qué juego de coincidencias hay allí? Todos los que buscan obtener beneficio de las necesidades de la población, en detrimento de los servicios públicos, no parecen ser unos emprendedores súper competentes, más bien se comportan como unos pedigüeños en busca del tesoro público. Como la iglesia hace en la educación. El capital y la derecha española ven que,  los servicios públicos mueven muchos millones, queriendo que pasen a engrosar sus cuentas. Para eso cuentan con el marianismo, que les esta haciendo un magnifico servicio. En su maquiavélico fin, irán destruyendo la Seguridad Social, la educación, las pensiones, las protecciones por desempleo, el Estado social y de derecho que protege a los ciudadanos. El PP acabará con todos los vestigios sociales que encuentre.

La estrategia del ataque conservador, consiste en aplicar un recorte social e inmediatamente otro, sin dar tiempo a censurar al primero. Todo va muy rápido, de manera que una medida nueva haga olvidar a la vieja. A esta maraña manipuladora, le añaden una dureza extrema de planteamientos, no cambiando ninguna de sus propuestas por muchas razones que les invoquen, ni por mucha que sea la presión sindical que se les pueda hacer. UGT y CCOO, el 29-M, hicieron la segunda mayor huelga general de la democracia en contra la reforma laboral y, como nunca ha ocurrido, el Gobierno popular no ha cambiado nada de la misma. Los sectores de sanidad y educación, llevan varios meses  en la calle protestando por sus recortes, cambios laborales y pérdida de empleo de miles de interinos; sin que los seguimientos masivos de los afectados y de infinidad de padres y ciudadanos, hayan conseguido mover la posición de los ministerios.

Otro procedimiento es, actuar como si los sindicatos no existieran, no teniéndolos en cuenta para nada. A la vez, que reducen los liberados sindicales y eliminan las subvenciones a las centrales sindicales, por la prestación de servicios que realizan. Debe quedar claro, que una de las metas del conservadurismo mariano, es acabar con los sindicatos de clase, concretamente con CCOO y UGT, al ser las únicas organizaciones con capacidad de oposición a las políticas antisociales gubernamentales. El PP y su derecha extremista, deben creer que con las campañas mediáticas que han hecho en contra de las organizaciones sindicales, estas ya no debían existir con el impulso necesario para movilizar e imponerse a sus políticas. Pero se están equivocando, cometen un gran error, la fuerza sindical es mayor a la que imaginan. Tanto con más como con menos liberados, o con subvenciones o sin ellas, los sindicatos mayoritarios continuarán vivos y activos, por mucho que a Mariano Rajoy, tanto como a la derecha y la ultraderecha del Partido Popular les pueda pesar. Que sigan adelante, que les saldrán al paso. Ya han convocado una nueva movilización para el 19 de julio. 

Sin embargo, es totalmente irresponsable seguir esa política gubernamental de desconsideración sindical, debido a que los conflictos acaban radicalizándose, lo que tiene que ser siempre un motivo de preocupación para todos, como desde hace tiempo lo es para mí. Si no se alivian, las ollas a presión explotan. Si quieren sindicalismo de confrontación, lo tendrán, no me cabe ninguna duda. UGT ha sido y es, un sindicato negociador, su estrategia es la de negociación-presión, siempre por este orden; pero cuando la negociación fracasa, es el primero en movilizarse y con más fuerza que nadie. Como estos días lo demuestran los mineros aragoneses, asturianos, leoneses, en su lucha ejemplar en defensa de sus puestos de trabajo. La mayoría de ellos, con la pegatina de UGT en el gorro y la camiseta, porque son afiliados y militantes de la organización. El Gobierno no cede en nada, pero cuando caiga lo hará a plomo.

Yo rechazo la violencia sindical, pero me parece gracioso el temor de algunos voceros mediáticos del PP, que se asustan porque ven a mineros con lanzacohetes, enfrentándose a la policía. ¿Qué pensaban estos señores, que eran las luchas obreras en un contexto de confrontación? Esos artefactos del miedo, ya se usaban hace años en la reconversión industrial y por eso, no estalló ninguna revolución, todo continuó en paz. Sí se debería pensar, que el conflicto minero esta radicalizado, porque el Ejecutivo no hace caso de sus reivindicaciones. Fenómeno este que debe hacer pensar a los ministros, porque puede extenderse a otros colectivos afectados por los recortes, si estos presionan y reciben como contestación, la misma dosis de silencio gubernamental que se usa como norma. El conflicto minero, es consecuencia de la arrogante e imperfecta política negociadora del Gobierno. Él es el culpable y tiene que rectificar.

La sana lucha de los mineros, ha levantado la moral de la clase trabajadora española. Ellos tienen toda la razón y el ministro ninguna. Estos compañeros, defienden el pacto de continuidad de las minas, que tienen vigente hasta el 2.018 y que el actual gobierno incumple, recortándolo en un 60% este año, lo que se teme que será el cierre de las minas. Siendo maravilloso verlos entrar el día 11 en Madrid, después de que 200 mineros hubieran andado 400 kilómetros desde sus lugares de origen, en la llamada “marcha negra”; recorriendo después la ciudad por la noche, con el foco del casco encendido, acompañados de 200.000 madrileños que los fueron a recibir. Todo un fenómeno nunca visto, que las televisiones no transmitieron en directo, aunque a la selección de fútbol sí. A la mañana siguiente, miles de personas llegadas en 500 autobuses desde las cuencas mineras, los acompañaron por la Castellana hasta el Ministerio de Industria; pero fiel a su recetario, ningún representante del departamento recibió a los mineros. El conflicto seguirá y lo ganarán. Aún quedamos muchas personas que les podemos ayudar. Un niño de 12 años dijo: “Si cierran las minas nos quedamos sin cuartos” Un día después, el titular de Industria, José Manuel Soria, solicito comparecer en el Congreso, por el tema del carbón. Según el diputado asturiano Gaspar Llamazares: “Él ha decidido incendiar y él tendrá que apagar el fuego”. Joaquín Carbonell ha escrito: “Los mineros son la representación de la dignidad obrera”.

El recortazo que hundirá España


En eso estábamos, cuando el 11 de julio (una fecha para recordar), el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en uno de sus días más felices, presentó en el Congreso de los Diputados, el recorte más brutal e irracional imaginable, recibido con gran enojo por los ciudadanos y con grandes sonrisas y aplausos en la bancada popular, lo que fue ofensivo para la población (también para recordar). Las medidas con recortes para funcionarios, parados, dependientes y subidas de impuestos; lograrán un ajuste de 65.000 millones de euros en los próximos dos años. A ellos se suman los 27.000 millones que el Gobierno recorto en diciembre. Más los 18.000 que están recortando las comunidades autónomas. Lo que suma una reducción de 110.000 millones de euros. El anterior Ejecutivo del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, recortó 15.000 millones en dos años. Las medidas principales son:

1.      Incremento del IVA general en tres puntos, del 18% al 21%. El tipo reducido del IVA pasará del 8% al 10%. Se mantiene el tipo superreducido en el 4%. La recaudación del IVA, ha retrocedido un 10,1% hasta mayo. Ahora se contraerá más. Ya se dice: ¡IVA España!

2.      Recorte del subsidio de desempleo a partir del sexto mes, del 60% al 50% sobre la base reguladora, para “animar la búsqueda activa de trabajo”. Piensan que los parados no trabajan porque son vagos. Al oír la medida, la diputada popular Andrea Fabra dijo: “¡Que se jodan!” 

3.      En 2.012, suspensión de la paga extra de Navidad a los funcionarios. Lo que se deje de percibir se les devolverá a partir de 2.015 a través de un fondo de pensiones. Cuando se plantea algo así, al final no se suele cobrar nada. Que se vayan preparando los jubilados.

4.      Más impuestos, posiblemente a través del céntimo verde, una tasa sobre los hidrocarburos que supondría un recargo de entre tres y cinco céntimos por litro de carburante. Lo que le faltaba al sector del automóvil.

5.      A partir de 2.013, se elimina la reducción por la compra de vivienda para los nuevos compradores.

6.      En la Ley de Dependencia, se revisará el baremo y las prestaciones del 2.013.

7.      En las administraciones locales, reducción del 30% de concejales por tramos de población.

8.      Drástica reducción de empresas públicas en el ámbito local.

9.      Flexibilización de horarios comerciales.

10.  Recorte adicional de un 20% en las subvenciones a los partidos políticos, sindicatos y organizaciones patronales. “¡A trabajar, vagos!” y “¡A Cuba!” gritaban energúmenos diputados populares, cuando Rajoy hablaba de reducir el numero de liberados sindicales en la administración. Cuando tiene ocasión, la ultraderecha del PP enseña su patita. 

11.  Recorte en los ministerios de 600 millones de euros en las partidas de gastos.

12.  Reducción de empresas públicas y fundaciones.

13.  Se abre la puerta a una rebaja de las pensiones. El Gobierno llevará al Pacto de Toledo un nuevo proyecto de ley sobre el sistema de pensiones, para acelerar la aplicación del “factor de sostenibilidad” y abordar la jubilación anticipada. Será un empeño más, a favor de las pensiones privadas.   

14.  Una rebaja de dos puntos en las cotizaciones sociales de las empresas a la SS. Un punto en 2.013 y otro en 2.014. Otro regalito a la patronal.

15.  Liberalización y, en su caso, privatización de los servicios asociados al transporte ferroviario, portuario y aeroportuario. La RENFE se va a liberalizar, o sea a privatizar.

En total quince nuevos recortes, que se suman a los anteriores y que habrá que añadir a los siguientes que faltan por venir, porque con esta política austera recortista que sigue haciendo el Gobierno, se terminará de hundir España. Debido a que cada día la economía irá peor, siendo menor progresivamente la recaudación fiscal del Estado, por la caída paulatina de la actividad y del consumo. El Ejecutivo seguirá diciendo, como no tengo voy a recortar más, sin que sea capaz de sacar el país de esta rueda infernal. En todo lo propuesto por el Presidente, no hay ni una sola medida dedicada a la creación de empleo y al crecimiento. ¿Quién puede pensar, que con esta economía cobarde y de rapiña, se puede salvar el país? Felipe González se cansa de decir: “Sin crecimiento España se arrastrará por el barro durante 10 años. El que no crece no paga”. Siendo igualmente clarificador lo escrito por el exministro y líder del Partido Verde alemán, Joschka Fischer: “Queda aún por verse cuanto daño político habrá causado al sur de Europa la política de rescates de Alemania para la Eurozona, con su mezcla de austeridad, desempleo a gran escala y depresión económica. Es importante reducir los desequilibrios económicos, e igualmente coordinar las políticas europeas para estimular el crecimiento”.

Siendo totalmente vergonzoso, el que nuevamente todos los sacrificios y recortes de Mariano Rajoy van siempre para el mismo lado: las clases media y baja, nunca para la alta. Podía haber establecido: “Un impuesto a las grandes fortunas y a las grandes empresas”. “No se recorta nada a La Iglesia, a la Casa del Rey, en el gasto de Defensa”. No se incrementa “el impuesto sobre el patrimonio”. No se incide “en la economía sumergida”. No se persigue de verdad “el fraude fiscal y del IVA”. No se establece “una tasa sobre transacciones financieras”. Se libra “a los grandes bancos de una mayor aportación”.

Por el contrario, el primer ministro francés, el socialista Jean Marc Ayrault –François Hollande es el Presidente-, anunció también ante el Parlamento nuevos impuestos para las grandes empresas y los ricos. Reinstauró el impuesto sobre las fortunas y el de sucesiones. Suprimió el aumento del IVA previsto para este otoño. Garantizó que las clases populares y las clases medias serán exoneradas del esfuerzo, mientras que los ricos deberán contribuir mucho más. Además de crear una tasa especial para los bancos y las empresas petrolíferas. Han establecido una imposición del 45% para los más ricos y del 75% a partir de un millón de euros anuales de ingresos.

Pero claro, con ese programa francés, Mariano Rajoy no podría hacer su mísera revolución a favor de los de arriba, quitando todo a los de más abajo. Si al menos las pérdidas fueran repartidas entre unos y otros, o como mínimo que hubiera una sola medida para ellos y el resto para nosotros, sería otra cosa. Sin embargo, ni aún eso se hace. Así diré, que yo no creo que los recortes o la política económica concreta se imponga desde Bruselas. De entrada y durante mucho tiempo, desde el Fondo provisional EFSF, se va a rescatar a la banca española con hasta 100.000 millones de euros, lo que significa que España está duramente intervenida y vigilada porque el que presta quiere cobrar. Pero se ha de saber, que el cobro se tendrá en todo momento asegurado, con el memorando que la troika (FMI, BCE, CE), con sus guardianes los hombres y mujeres de negro, hará cumplir a los bancos intervenidos. Además de contar con la garantía final del aval del Estado, tal como ese propio fondo de rescate exige en sus normas. En el futuro puede ser diferente, al poder desaparecer la garantía pública de pago; pero yo dudo de que lo vaya a ser.

En mi opinión, la Comisión Europea, la troika, junto a todos los estamentos europeos y mundiales, lo que de verdad quieren es, que el Ejecutivo español alcance el objetivo de déficit del 3%, ahora en 2.014. Y en eso son y serán muy firmes. Ese objetivo, es tan difícil de alcanzar y, el recorte de tal envergadura, que al país no se le pueden poner más obligaciones. Ya tiene bastantes. Yo creo las palabras del ministro De Guindos, cuando dice, que nadie les ha impuesto nada. En las reuniones internacionales, en principio se confía en cada delegación, como se fiaron de los griegos y hasta ahora de los españoles, aunque con alguna duda, por la informalidad gubernamental. Por eso se marcan los objetivos a cumplir; pero en la forma de alcanzarlos en cada país, se responsabilizan las representaciones locales. Al menos esa es la experiencia que yo tengo. No verlo así, me parece equivocado. 

Así, el 3% del déficit fijado, se puede obtener haciendo que paguen más los que más tienen, e incrementando los ingresos y reduciendo los gastos. Pero difícilmente se podrá lograr, pagando la factura los pobres y recortando únicamente los gastos.  Hollande ha elegido la primera vía y Rajoy la segunda y ambas son admitidas en Bruselas. En nuestro caso, previa inspección de la Troika. Por lo tanto, todo lo malo que se está haciendo aquí, es responsabilidad del Gobierno del Partido Popular. Que los populares no se escuden en nadie, buscando culpables para sus fracasos. De los triunfos de la revolución conservadora, se vanagloriará Mariano Rajoy, con el desprecio absoluto del pueblo español. Ese será su castigo. El Presidente sí debe saber que, si no consigue el déficit estipulado, la troika lo hará caer... como ha hecho con otros. Hoy, los trabajadores públicos han tomado la calle.

         
13.07.2012                                                                                                  Fernando Bolea Rubio
                                                            Sindicalista