Con
el resultado de dos encuestas han surgido serías inquietudes. La de Metroscopia -02.11.2014- para el diario
El País y la del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) -05.11.2014-; en
las que Podemos (PO), supera en
estimación directa de voto al Partido Popular (PP) y al Partido Socialista
Obrero Español (PSOE). Todo es debido a la desconfianza mayoritaria que la
población tiene en la nueva formación PO.
En
el primer sondeo -previo cocinado del voto directo-, en el resultado estimado
de voto válido, la lista que lidera Pablo Iglesias sería la más votada, con un
27,7%, el PSOE obtendría un 26,2%, PP 20,7%, Izquierda Unida (IU) 3,8%. En el
segundo, por sal en exceso, el PP ganaría con un 27,6%, el PSOE alcanzaría el
23,9%, PO 22,5%, IU 4,8%. Siendo la madre de todas las encuestas, la realizada
por la Fundación Sistema, cuyo Presidente es Alfonso Guerra, muy salado él
también, donde el PSOE sacaría 10 puntos a PO y al PP, al situarse el PSOE con un 31%, PO 21%, PP 20%, IU 8%.
Lo
que voy a decir, puede parecer arriesgado aventurarlo, pero pienso que esa última
encuesta es la que más se acercará a la realidad. Porque yo confío, a más no
poder, en la sensatez de los votantes, siempre que el nuevo PSOE de Pedro
Sánchez, les presente un programa con claros rasgos de izquierda que no
inquieten al centro, pero volcado al lado del corazón. Un abogado que yo creía
conservador, me ha dicho: “A mí como no me gustan los extremos, he votado
siempre al PSOE y votaré al mismo”. Varios amigos comentan: “Ahora se habla
mucho de PO, es la expresión de la indignación, pero a la hora de la verdad, en
el momento de echar el voto en la urna, las cosas se verán de otra
manera”.
Además,
lo que el Partido Socialista tiene que hacer es muy sencillo: Generar confianza
en la gente, atajar con mano dura la corrupción que esta anieblando el país,
defender con firmeza el Estado del bienestar, restablecer justicia social en el
mundo del trabajo, atajar el paro con todas las medidas a su alcance, hacer que
la juventud tenga esperanza y futuro, cuidar de los mayores con el cariño y las
pensiones que se merecen, amparar con las medidas sociales necesarias a la
población más necesitada, atención a la infancia, decir siempre la verdad
aunque no guste.
Lo
que el partido tiene electoralmente enfrente es también fácil de batir. El PP,
con su líder Mariano Rajoy, al que en su partido lo quieren jubilar, al haber
movimientos internos de oposición, para que no encabece la próxima candidatura
a la Presidencia del Gobierno. Rajoy es un político quemado e inservible para
la derecha de cara al futuro. Ha llevado a cabo, la revolución conservadora que
se denunció aquí, dejando a los trabajadores sin protección, el bienestar de la
sociedad tambaleante, recortando derechos y servicios públicos. Y, claro, como
todo crimen tiene su castigo, el de este señor será no repetir en las listas, o
si lo hace recibir un sonado castigo en las urnas. Será justo, dado que ha
empobrecido a los españoles, hundido a la juventud, hay niños y mayores que pasan
hambre, ha conducido la economía por el camino equivocado de la austeridad, sin
estímulos públicos de crecimiento, ha endeudado el país a extremos
incalificables.
Sólo
en la Comunidad Autónoma de Aragón, la deuda pública asciende a 6.131 millones,
el 19% del PIB aragonés; desde que él gobierna, junto a la Presidenta popular
del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, el endeudamiento se ha duplicado
al pasar de 3.403 millones a la cantidad actual, a razón de casi 1.000 millones
más al año. ¿Quién los pagará? ¿Se puede continuar mucho tiempo así?
A
los líderes de Podemos los ha calificado muy bien el escritor y poeta,
Caballero Bonald, al decir a Pepa Bueno en la SER: Son unos “profesores
pedantes”. Que más se puede añadir después de esto, que en dos palabras lo dice
todo. Sobre “pedante”, el diccionario detalla: “Dícese de la persona engreída,
que hace ostentación y alarde de su erudición”. Engreído: “Persona que esta
demasiado convencida de su valía”. Recientemente, un amigo me dijo: “¡Es que
son profesores!”. Y qué... le contesté. Y yo sindicalista. Y en verdad te digo,
que te puedo presentar a trabajadores y a sindicalistas que en un debate, les
darían cien vueltas. Es patético ver a uno de sus celebres, Juan Carlos
Monedero, queriendo imitar sin gracia ni sabiduría, al histórico y gran
exalcalde socialista de Madrid, Enrique Tierno Galván; cantando por un
micrófono sin vergüenza, porque aspira a ser alcalde de esa gran ciudad. Que
atrevida es la ignorancia.
PO
es más que otro cosa producto de dos TV privadas, Cuatro y La Sexta, junto al
fracasado periódico digital, Público, que ahora no es atrayente leer. Sí he
detectado que los telespectadores se empiezan a cansar, de tanta presencia de
PO en las TV citadas y las dejan de ver. Otro amigo ha escrito en Facebook:
“Entre todos estamos alimentando una fiera”. Estoy de acuerdo con él. IU ya va
diciendo: “No pactaremos con ellos disolviendo las siglas”. Menos mal. Les esta
entrando la cordura. El diputado de IU por Málaga, Alberto Garzón, acérrimo
partidario de converger con PO, acaba de declarar: “Se puede estar construyendo
un gigante con los pies de barro”. Añadiendo: La estrategia de Podemos es
“ambigua y populista”. Yo tengo la impresión, de que a partir de ahora PO
bajará e IU subirá, si siguen siendo ellos mismos.
Con
el resultado de las encuestas expuestas, en el momento de formar el Ejecutivo
se podrían dar varios escenarios. Gobierno PP más UPyD, catalanes y vascos.
Gobierno PP-PO (tipo pinza Julio Anguita en el pasado), dado que podríamos
llegar a ver de todo. PSOE-PO, si los segundos dejaran el populismo. Gobierno
PSOE, con vascos y catalanes. Gobierno del PSOE en minoría. Gobierno PSOE-IU, el
ideal para mí. Nunca un Gobierno de Gran Coalición PSOE-PP, como en Alemania,
aunque sí acuerdos puntuales entre ellos y de Estado como ahora se hace y que
es necesario hacer. Asimismo, puede ocurrir, que estalle la burbuja populista
de golpe y gane PO, con lo que habría nuevas Elecciones Legislativas un año
después, por su desconocimiento de la política real y los rancios sistemas
asamblearios para gobernar. De todas formas, con la dispersión electoral
existente, podría haber instituciones que no se pudieran formar, llegando a
pasar en ayuntamientos pequeños y grandes, en Comunidades Autónomas y hasta en
el Gobierno Central.
Sin
embargo, este tablero de ajedrez gubernativo no nos debe preocupar en exceso.
Porque tal como va subiendo, el PSOE superará el 30% de votos, quedando así por
encima del PP y de los demás partidos, tal como el sondeo de la Fundación Sistema
indica. Como dice Pedro Sánchez: “El buen gobierno llegará de la mano de los
socialistas con el PP en la oposición”.Yo lo creo. Mi confianza en el pueblo
español si el Partido Socialista se porta bien con él, me hace pensar hoy, que
el próximo Presidente del Gobierno español será socialista.
14.11.2014
Fernando Bolea Rubio
Sindicalista