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Zaragoza, Aragón, Spain
Sindicalista de UGT Zaragoza entre 1977 a 2006. Periodo en el que fue uno de los refundadores de UGT Zaragoza, Sº de Acción Reivindicativa de UGT Zaragoza, Sº General de UGT en General Motors España, Presidente del Comité de Empresa de GM España, Sº General de UGT Metal Zaragoza, miembro del Comité Confederal de UGT y formó parte del Comité Europeo y Mundial de General Motors .

viernes, 2 de octubre de 2015

Debate en frío

Las Elecciones Catalanas del 27-S, han dado como resultado: Los separatistas de Junts pel Sí, la lista del presidente en funciones, Artur Mas, obtuvo 62 escaños. La izquierda radical de la candidatura d´Unitat Popular (CUP), consiguió 10. Ciutadans (C´s) 25. Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC-PSOE) 16. Catalunya Sí que es Post (Podem, Esquerra Unida) 11. Partido Popular 11. En definitiva, los independentistas contando con los 10 de la CUP, lograron 72  diputados superando los 68 de la mayoría en el Parlamento.

Sin embargo, no consiguieron  mayoría de votos, al obtener el 47,8% de los mismos, frente al 51,7% de las papeletas no independentistas. Así diré que, los soberanistas ganaron las Elecciones Autonómicas ampliamente, pero que el resultado no les permite hacer una “DIU” o Declaración de Independencia Unilateral; como siguen queriendo hacer, porque esa posibilidad la perdieron, al no alcanzar el 50% de los votos.

En virtud de lo cual, Artur Mas y sus amigos tendrían que meterse en el bolsillo su hoja de ruta secesionista, reconociendo de una vez que hay mayoría de catalanes que no quieren separarse de España. En democracia un 52% de los antisoberanistas es más que el 48% de los soberanistas. Y esa voluntad se ha de respetar. Para iniciarse un proceso de independencia así, todas las personas cabales saben, que sería necesario contar al menos con una mayoría calificada de dos tercios, 90 diputados. No con 72 (Junts pel Sí y la CUP) como se quiere hacer, al suponer 18 escaños menos a los dos tercios, en un total de 135. Y no cabe ni pensarlo, en minoría de votos.

Con este resultado el presidente en funciones, Artur Mas, se ha quedado en tierra de nadie. No tiene autorización para seguir su plan separatista y además, la CUP no lo quiere votar para salir elegido presidente -por representar la “corrupción, los recortes, y las privatizaciones”-, no obteniendo así los votos necesarios para ser investido. Ellos mismos se han metido en un túnel sin salida, dado que Ciudadanos ya habla incluso de convocar nuevas elecciones. Sin la CUP, Mas no puede ser presidente ni en primera ni en segunda vuelta. Y, tampoco quiere dimitir, e irse, como tendría que hacer.

Con todo, hay una fecha limite, el 9 de enero, para elegir al presidente o se tendrían que convocar nuevas elecciones. Que es lo que pienso que ocurrirá, porque Mas no se va a bajar del caballo una vez en él. Quedando únicamente la posibilidad, de que sus propios compañeros le claven el puñal, proponiendo a la CUP otra persona para president que estos pudieran consentir. Ya suenan los nombres del presidente de ERC, Oriol Junqueras, el del primero de la lista, Raül Romeva (Mas iba camuflado en cuarto lugar), o la expresidenta de Ómnium, Muriel Casals. Por lo tanto, o  traición, o nuevas elecciones, porque no hay otra posibilidad.

No obstante, queda la parte positiva, en el sentido de que con un resultado tan ajustado, llegará el momento que  habrá que sentarse a negociar. Pero en el túnel solo veo, una luz socialista reformista de salida. No una rupturista, ni constituyente, ni por descontado inmovilista como la que el Gobierno de Mariano Rajoy mantiene. En todo caso, aunque en este momento se llamara a los socialistas a la mesa de negociación; con las llamas encendidas que el separatismo ha provocado, las familias divididas, los balcones con banderas, las calles en tonos subidos, así no se podría negociar. Este debate y la negociación se debe hacer en frío, sin pasiones que harían fracasar la negociación, provocando desilusión y nuevos enfrentamientos innecesarios.

Los sindicalistas sabemos muy bien, que no se negocia y a la vez se hace una huelga. La presión tiene su tiempo y la negociación también. Pero los dos procesos no van a la par, acabado uno empieza otro. La negociación requiere tranquilidad, dejándose los pitos en el cajón y el calentamiento en stand by, en reposo.

Por consiguiente, que se vayan calmando los ánimos de los separatistas y de los separadores de Madrid, que también los hay. Mientras tanto, que en la mesa se ponga el mantel, no se necesitan flores; pero sí voluntad, creer en la negociación, inteligencia, tolerancia, saber ponerse en el lugar de la otra parte para comprender mejor sus argumentos. Sabiendo de antemano, que en una negociación nunca se consigue todo lo pretendido. Antes se decía que cuando las dos partes perdían, la negociación estaba bien hecha. Aunque esa apreciación, fue superada por la filosofía Gana-Gana, donde el beneficio es mutuo. No solo ha de ser para Cataluña, igualmente para las demás comunidades. Una negociación así, sería la ideal.

Actualmente, Cataluña está en un periodo de agitación, de calentamiento y se necesita tiempo para que las brasas se puedan enfriar. El fuego se va apagando si le falta leña. Y, ante todo, sin más provocaciones de nadie, por favor. Se ha de saber que, Cataluña ahora con la mirada al frente, en realidad camina para atrás; hacia otro siglo ya vivido y que el internacionalismo ha superado. Eso sí, Cataluña debe tener en cuenta, que el Estado español nunca se dejará perder el 20% del PIB, que esa comunidad supone. Serían malos políticos y gestores si lo permitieran. Nunca se consentirá.

Asimismo debo decir, que no me gusta nada el afán independentista que observo allí, porque me lleva a pensar que ese separatismo de los dineros que capto, tiene claros signos de insolidaridad con el resto de los territorios españoles. La insolidaridad es mala compañera, amigos. Sin ella, esa comunidad y el mundo serían mucho peor. Del mismo modo, el separatismo de la CUP para mi es desorientador. Sí son tan de izquierdas, ¿por qué defienden los intereses burgueses del independentismo catalán? Sigo pensando que los nacionalistas e independentistas no son de izquierdas. La izquierda real lucha por el bienestar de las clases humildes y de los trabajadores de todo el mundo por igual. Lo demás es postureo.  

Y así, que se vayan bajando los ánimos y configurando la designación de la persona tolerada para ser el nuevo President. Perdiendo tiempo hasta diciembre, para conocer la configuración del nuevo gobierno de la nación. Con la esperanza, de que el próximo Presidente del Gobierno sea el socialista Pedro Sánchez. El cual, en aguas tranquilas deberá empezar y concluir la negociación del proceso catalán a satisfacción de todos.

El PSC y el PSOE proponen para Cataluña y España, la llamada Tercera Vía Federal. Porque como dicen: “El federalismo es sobre todo negociación, es pacto, es tender puentes y dar soluciones”. El candidato socialista, Miquel Iceta, dice: “Por desgracia todo apunta a que Junts per Sí y la CUP se inclinan por crear un gobierno de confrontación”. “El PSC no esta por sumarse a un frente independentista, ni tampoco a un pacto inmovilista, en referencia a Ciutadans y el Partido Popular.” Para la candidata del PSC por Barcelona, Carme Chacón: “Solo queda negociación, acuerdo y votación final. Unos querrán votar ruptura y otros queremos votar acuerdo”. El periodista, Iñaki Gabilondo, vaticina: “Problemas serios y muy pronto”.

En el año 2013, a través de la Declaración de Granada, el PSOE trazó las líneas de una España Federal, que plantea la defensa de la unidad de España, el “respeto a las singularidades territoriales” y “la igualdad de derechos de todos los españoles, vivan donde vivan”. El partido tiene pues, proyecto, voluntad y líderes capaces para llevarlo a cabo. ¡Que no se desaproveche esa oportunidad!

El PSOE representa el reformismo frente a la inacción política de Rajoy. En mi opinión, el socialismo reformista  es lo más revolucionario que en la izquierda existe hoy. De todas formas, la cúpula socialista no tiene intención de enseñar todas sus cartas... cuando los demás no lo han hecho. Magnífico, ningún buen jugador o negociador lo hace.

En ocasiones se critica a los sindicatos mayoritarios y de clase, UGT y CCOO, porque parecen aislados de la iluminación divina del señor Mas. Ahora bien, hay que pensar que con su actitud, posiblemente están evitando el nacimiento de un sindicato amarillo independentista catalán, que agravaría más el culebrón. Los sindicatos no luchamos contra los dioses.

2.10.2015                                                                                 Fernando Bolea Rubio
                                                                                            Sindicalista