En
una sorprendente y bien dirigida acción política, el Partido
Socialista Obrero Español (PSOE) ha conseguido
llegar al
Gobierno de España, situando
a su líder Pedro Sánchez Pérez Castejón en la presidencia de la
nación. Todo
se ha debido a que la política del país no aguantaba más y el
Congreso aprobó la
moción de censura al Ejecutivo del Partido Popular (PP) que los
socialistas presentaron. Produciéndose
un cambio gubernamental que la población agradeció dando continuas
muestras de su alegría, por
su capacidad y dignidad.
Lo
cierto era
que el PP estaba quemado por la corrupción, los viejos asfixiados
por las bajas
pensiones, las trabajadoras y los trabajadores sufriendo la
precariedad de sus contratos de trabajo y sus sueldos míseros
por las reformas laborales, la
juventud huyendo al extranjero para poder tener un proyecto de vida;
los
pobres en sus casas tapándose con mantas para poder aguantar el
frío,
unos
medios de comunicación que, salvo excepciones, no
eran creíbles por su constante manipulación. España
no tenía ningún peso en la Unión Europea y menos en el resto del
mundo, somos un país de camareros sin industria suficiente. El
Estado no invertía lo necesario
en investigación y desarrollo, en educación, sanidad, reparación
de infraestructuras. Los
recortes en dinero público eran su doctrina, hacerse con capital
extraído de las arcas del Estado su obsesión
continua.
El
problema catalán se les había ido de las manos, suponiendo un
serio peligro para la unidad territorial.
Quitar
del Gobierno a los populares era una necesidad tan
clara, que de inmediato los diputados -excepto los de la derecha del
PP y Ciudadanos (C’s)- apoyaron la moción socialista, saliendo
adelante. Lo que significó
que Mariano Rajoy y sus ministros tuvieran que irse, con
satisfacción y alegría de la izquierda.
El
Presidente, Pedro Sánchez, es una persona muy formada. Habla inglés
y francés
perfectamente y se defiende bien en italiano y portugués. En España
por fin tenemos un Presidente que puede hablar directamente
con el resto de los mandatarios europeos y mundiales, sin
interpretes, lo que nunca antes ha ocurrido. Es
una persona viajada
e
internacional
-no
como los populares
que de Galicia no salen-,
dado que
ha recorrido Estados Unidos y Europa, con funciones económicas
y
políticas. Habiendo
trabajado en Nueva York (Wall
Street), Bruselas
(Parlamento Europeo), Sarajevo (Bosnia).
Él
es doctor en economía, aprobó
un máster en Madrid, otro en Bruselas, domina
la política, es de izquierdas y
socialista. La
frase que Susana Díaz
dijo de él: “Este
chico no vale, pero nos vale”, fue
una
afirmación malintencionada, que hoy malamente la califica.
Pero
sobre todo, hay que considerarlo un
socialista decidido
y valiente. Ha
tenido en contra al aparato y a los barones del partido -empezando
por el de Aragón, al
que
yo
no se si votaré-, y ha salido triunfante alcanzando lo que ahora
es, con
ayuda de los afiliados socialistas que pronto le vimos lo que era
y
podría
llegar a ser. Felipe
González lo ha maltratado. Rubalcaba que parece que se le ha ido la
cabeza, se hizo fuerte en el diario El País escribiendo o sugiriendo
editoriales vergonzosos contra su figura. Lo hicieron dimitir de
secretario general del PSOE, abandonar el Parlamento creando una
carencia que los contrarios han aprovechado bien. Todo
eso le supuso, coger su coche particular y salir a la carretera
pagándose los
gastos y
la
gasolina,
cenar y dormir en casa de afiliados, no cobrar de ningún sitio,
hacer trayectoria
e
historia.
Pedro
Sánchez ha presentado un buen Gabinete. El que este
formado
con
más
mujeres
que
hombres
ha sido una agradable sorpresa. Con
ministros de la talla europea
y española
de Josep Borrell, la
juez
Margarita Robles, el
ingeniero aeronáutico -numero uno de su promoción- y astronauta
Pedro Duque, la
economista Nadia Calviño que dejo el
control de
las finanzas europeas por las españolas, la
jurista y política socialista
Magdalena
Valerio en trabajo, la magnífica
fiscal Dolores Delgado, la
jurista constitucianalista
Carmen Calvo, junto a diez celebridades
más. Hay
dos maneras de formar los equipos. Una, rodearse de gente simple,
para que ninguno te haga sombra. Otra, elegir a los mejores; como yo
siempre he hecho y por
lo visto,
Sánchez también.
Este
es sin duda el Ejecutivo que los españoles de
las clases baja y media
se merecían, después de los sufrimientos de la crisis económica,
los
recortes,
las calamidades del trabajo, las penurias económicas, la
vergüenza de la corrupción del PP, las
mentiras de C’s, el
bochorno
y
los
abusos de los independentistas.
Hasta
el periódico El País ha cambiado su anti socialista
linea editorial con los esperanzadores
cambios que esta haciendo. José Luis Cebrián
ya no manda en el Grupo Prisa, Soledad Gallego Díaz la nueva
directora ha dicho: “El País es un periódico de centro-izquierda
y progresista en lo social… pero no un periódico de izquierdas.
Ademas nunca ha pretendido serlo”. Tal como esta todo, a mí
con eso me basta, lo volveré a comprar.
El
triunfo de la moción de censura socialista, ha barrido de lado a
lado la política española. El
Gobierno del PP ya no existe, C’s se ha quedado noqueado, Podemos
se ha tranquilizado, los independentistas quieren hablar y quizá en
otros términos, se ha causado una honda impresión en Europa, la
oposición interna a Pedro Sánchez en el PSOE ha pasado a mejor
vida.
16.06.2018 Fernando
Bolea Rubio
Sindicalista
